Mi historia

Llevamos 12 años casados, logramos embarazarnos a los dos años de matrimonio, ahí nuestros sueños e ilusiones comenzaron a crecer pero de un minuto a otro se derrumbaron por mi perdida.... la naturaleza fue tan sabia que al mes y medio estábamos celebrando de nuevo, no con la tranquilidad del primero, con mucho miedo por perder de nuevo..... sangraba como si estuviera menstruando y mi beta era negativa...... tenía solo un respaldo ecografico y test casero que aún afirmaban que yo estaba embarazada...... fueron casi 6 meses de angustia y agonía por ello. Ya cuando creíamos que podíamos respirar tranquilos me diagnostican una preeclampsia bastante riesgosa, ahora rezábamos para llegar a las 27 semanas para que nuestro bebe fuera viable......sumamente angustiante..... desde las 27 semanas en adelante como reos de la cárcel marcando una a una las semanas tratando de llegar a la meta......entre tanto algunas otras dificultades se fueron presentando que nos hacían tambalearnos de un lado a otro......pero seguíamos con nuestro embarazo en curso.......al fin a las 39 semanas como consecuencia de la preeclampsia se acabó el liquido amniótico una cesárea de urgencia me convirtió en madre por primera vez.

El batallar diario de esa gran alegría se olvida con el tiempo pues no hay nada más placentero que tener ese ser tan tuyo que te abraza y besa cada día.

Con el pasar de los años hemos intentado lograr nuevamente el milagro a pesar de toda mi cansadora experiencia de pasar completamente un embarazo en reposo........he vuelto a perder hijos y cada vez me hago menos sensible a dichas perdidas, ya casi parecen parte de una rutina, ya no solo es lograr un embarazo, sino también es lograr que este avance como Dios manda..... no quiero numerarlos y menos aún relatar las dolorosas experiencias, solo quiero pensar que en un futuro no muy lejano podré lograr nuevamente ganar esta batalla y salir triunfante de esta guerra llamada infertilidad secundaria.

El tema de las estimulaciones, inseminaciones, seguimientos, inyecciones, hiperestimulaciones, el síndrome que me acompaña y dolores que debo tolerar continuamente, creo que es una canción conocida para muchas y que algunas ya sabemos bailar de memoria...... pues no importa cuantas veces hemos intentado, no importa cuantas toleren nuestro entorno para seguir intentando, no importa el dinero invertido y tampoco el perdido, pues creo que a pesar todos aquellos pequeños fracasos salimos triunfantes y airosas...... con o sin hijos......ganamos la tranquilidad de haber puesto todo de nuestra parte y lo que estuviese a nuestro alcance para volver a ser madre o ser madre por primera vez, creo que la sabiduría en todo esto está en que a pesar de caer continuamente al final seremos capaces de ponernos de pie y seguir nuestra vida aprendiendo a ser feliz con lo que tenemos y no vivir lamentandonos por lo que no tenemos.